Dejado de lado por un momento la apasionante trayectoria del primer equipo sanbenitense, en el aspecto societario los directivos habían convocado a asamblea anual ordinaria para elegir nuevas autoridades en principio para el 5 de febrero, la que se prorrogó para el 19 de mismo mes a raíz de la lluvia caída. Es digna de conocer la curiosa convocatoria llamando a la participación, justificándola con el siguiente argumento: “en todo conjunto social, especialmente en los que como el nuestro los vínculos sentimentales y amistosos no se han diluido todavía en la vorágine cambiante de la grandes urbes…”
La nueva Comisión Directiva quedó integrada de la siguiente manera: Presidente Pbro. Horacio T. Laurencena; Vicepresidente Enrique Puigarnau; Secretario Ángel O. Martínez; Pro Secretario José Picotti, Tesorero Nelson Zorzenón; Pro Tesorero Rodolfo Bigot; Vocales: 1° Carlos Micheloud, 2° Feliciano Padoán, 3° Máximo Müller (h), 4° Oscar Pando, Vocales Suplentes Remigio Lódolo y Eleonildo Bigot; Revisores de Cuentas Atilio Firpo y Pedro C. Vieytes. Los delegados a la L.P.F. fueron Nelson S. Zorzenón y Aníbal R. Famea.
El reciente ascendido equipo benitense fue invitado especialmente a participar de un cuadrangular organizado por el Club Belgrano, en el que participarían también Patronato y Paraná; curiosamente, los tres equipos capitalinos venían de ser los primeros en la tabla de posiciones del torneo superior de 1955.
La prueba de fuego sería nada menos que ante el encumbrado Club A. Paraná el 6 de marzo por la noche y los simpatizantes esperaban una buena actuación, dado el prestigio alcanzado. El triunfo sobre los paranaenses por 2 a 0 significó tal vez la conquista más importante hasta esa fecha a nivel de competencias de la Liga P. de Fútbol.
Pero la senda del triunfo continuó el viernes 9 de marzo frente al local Belgrano, que venía de derrotar 3 a 0 a Patronato. El árbitro designado fue Romero y los jugadores citados fueron los siguientes:
San Benito con Pedro Musich; Gerardo Michelín y Carlos Costa; Alfredo Guzmán, Oscar Téntor y Ademar Monay; José María Flaco, Orlando Toffolini, Héctor Falco, Raúl Izza y Máximo Müller.
Belgrano: Blanco; A. Medrano y Andino; Dusse, Córdoba y Bauzá; Rouseaux, Salazar, Merele, Rivero y Romero.
El importante triunfo fue por 2 a 0 nuevamente y con el mismo los “mirasoleros”, como ensayó a denominar el cronista a los jugadores rojiblancos, vieron más cerca la posibilidad de ganar el torneo; “la garra, la voluntad y el positivismo hicieron posible esta nueva hazaña de los santos benitenses”.
En el último encuentro estuvieron frente a frente Patronato y San Benito. Este último se había constituido en un adversario capaz de complicar al más encumbrado, pues venía poniendo a severa prueba a escuadras exitosas y añejas en el historial deportivo. Los dos triunfos anteriores le permitieron salir a la cancha con la posibilidad de especular con un empate para ganar el trofeo.
Nuevamente el grito de ¡Campeón! atronó en el estadio de Salta y Victoria de Paraná y se trasladó en caravana hasta el pueblo cercano, donde se festejó largamente; aquel miércoles 14 de marzo de 1956 la cancha de Belgrano supo de una vuelta olímpica más por parte de los bravos defensores de la “banda roja”, luego derrotar a Patronato y terminar con la valla invicta producto de las maravillosas intervenciones realizadas por el “Gato” Musich, gran figura junto al “Pelado” Michelín en dicho cuadrangular.
La entrega de premios se llevó a cabo en el salón social del club el viernes 1 de junio, con la presencia de una delegación del Club Atlético Belgrano; al finalizar se sirvió un copetín y se organizó una reunión danzante; también hubo colectivos desde Paraná.
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